Oscar Tenreiro
César MIguel Rondón, valioso periodista, hombre de radio y televisión muy respetado en Venezuela gracias a su mesura e inteligencia, asilado en Miami a consecuencia de la represión de Maduro, nos sorprende gratamente el 2 de agosto pasado, con una corta, sustanciosa e interesante entrevista al historiador mexicano Enrique Krauze (1947) que ha circulado por las redes sociales. Krauze es un conocido intelectual mexicano, director de la revista Letras Libres fundada por Octavio Paz (1914-1998) quien ha examinado a fondo el inicio, pasión y muerte del chavismo hasta llegar a publicar un libro en 2008 con el título «El Poder y el delirio», libro muy comentado y discutido en su momento como documento esclarecedor, que podría decirse que convirtió a Krauze en referencia obligada para todo intento de situar la traumática experiencia política de nuestro país.
En este momento la visión que Krauze tiene de lo que estamos viviendo resulta de especial interés no sólo para contribuir a poner en contexto la protesta masiva y espontánea de nuestra gente sino para que nos hagamos conscientes que lo que aquí está ocurriendo puede ser considerado como un punto de inflexión. Lucha cívica heroica según Krauze, quien advierte que el calificativo no es una simple figura retórica sino veraz y meditada.
Creo que tiene una importancia especial para los venezolanos que esperamos el desenlace de nuestra búsqueda de la democracia oír las escuetas pero especialmente valiosas consideraciones de Krauze y así enfocar mejor las consecuencias de lo que estamos viviendo. Incluyo a continuación algunos de sus pasajes más significativos y a la vez invito a ver la entrevista por este link: https://www.youtube.com/watch?v=3L9rJVJLnTg
Palabras de Enrique Krauze
…Yo creo que nunca se había visto la respuesta masiva, pacífica, heroica…de un pueblo en defensa de la libertad y la democracia…como se ha visto en esta semana, estos días, en Venezuela…hay precedentes de movilización, por supuesto, a todo lo largo de este período, pero nunca en la proporción y…el grado heroico…(realmente uso la palabra con un…yo no la uso con mucha frecuencia) pero Venezuela produce héroes como a Bolívar…y ahora produce a ese héroe colectivo que es el pueblo venezolano en las calles…
La presión tiene que seguir…y el costo que está pagando el pueblo venezolano crecerá…pero tienen que persistir…el mensaje fundamental es: «tienen que hacer que esto dure» porque yo tengo la certeza de que finalmente se tendrá que derrumbar el Régimen …y creo que ya, independientemente de lo que hablemos y de lo que opinen muchas personas…el pueblo no va a regresar …prefiere…es terrible lo que voy a decir …sacrificar la vida misma o una parte de ella…a vivir en servidumbre y sin libertad, porque sin libertad no vale la pena vivir.
De Venezuela viene la luz de la esperanza…si en Venezuela se logra la hazaña de un cambio, de una vuelta a la democracia …esto irradiará a América Latina e irradiará al mundo entero…No estoy hablando de una utopía, estoy hablando de algo que creo que puede ocurrir…
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Foto de Carlos Becerra tomada en Caracas en febrero de 2014
Agrego un par de cosas a lo que dice Krauze:
La protesta espontánea del día siguiente a las elecciones tiene contenidos heroicos sobre todo porque se produce como enfrentamiento a la permanente intimidación del Régimen amenazando la vida y la libertad de quien protesta; y la realiza un pueblo pacífico que se enfrenta a delincuentes armados que asesinan en las calles, parte del sistema de pandillas creado por Hugo Chávez (los llamados colectivos), del cual se ufanaba sin pudor alguno. Asesinatos selectivos que nunca se han investigado, a cargo de francotiradores que se ubican ocultos en los alrededores de las manifestaciones y asesinan siguiendo sus impulsos mas perversos. Salir a la calle en esas condiciones no es un simple acto de civismo, requiere coraje y además fe en lo que se está defendiendo: porque sin libertad no vale la pena vivir.
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Ver al tirano gritar, como acabo de verlo por internet, ante una minúscula asamblea de partidarios, diciendo que él es el presidente electo de los venezolanos, es una muestra clarísima de cómo la pandilla que se apoderó de Venezuela convirtió al cinismo en práctica usual; en producto, casi podría decirse, de un entrenamiento sistemático cuyo método y práctica es como el acta fundacional del chavismo. Porque es evidente que el tirano sabe de sobra que perdió las elecciones de manera aplastante y busca convencer aparentando y escondiendo la verdad. Grita para convencerse a sí mismo usando lo que caracteriza a todo gobierno dictatorial: la mentira como credo, la mentira como arma de lucha contra el que se le opone. Una escenificación que es tan burda, tan falsa, que lleva inmediatamente a plantearse estas preguntas: ¿Por qué los gobiernos llamados de izquierda (Colombia, México y Brasil) no son capaces de rechazar el muy evidente fraude de Maduro y su gente, asentado en un informe técnico de las Naciones Unidas y publicado ayer mismo? ¿Qué los retiene? Y contesto remitiéndome a lo que escribí aquí para destacar la valiosa actitud autónoma y veraz de Gabriel Boric el presidente de Chile: Lula, López Obrador y Petro se han convertido en víctimas de su propio pasado, la ideología congelada se les convirtió en mordaza. Tienen miedo de quedar fuera del catecismo que manejan los sectores de la izquierda que se han quedado estancados en el tiempo. Ya no les importa la verdad o la lucha cívica de un pueblo sino usar las palabras como sustitutos de la acción. No quieren ser juzgados con los argumentos con los que ellos juzgaron en el pasado.
Foto de Carlos Becerra tomada en febrero de 2014
¡TODOS A MANIFESTAR POR UNA VENEZUELA DEMOCRÁTICA ESTE SÁBADO 17 A LAS DIEZ AM !